Tenemos hoy una luna nueva en Virgo.
Virgo, en la rueda zodiacal se corresponde al arquetipo de la virgen. Asociad@ al servicio y la humildad, las rutinas y el detalle, este arquetipo tiene relación con los pequeños elementos o actos rutinarios que, aunque pasen desapercibidos, son indispensables para el sostenimiento y funcionamiento de la totalidad de un sistema. Quienes llevan a cabo dichos actos -o los actos pequeños en si mismos- suelen ser poco valorados. Sin embargo, solo a través de estos actos o elementos rutinarios es posible alcanzar el máximo potencial de cualquier empresa, proyecto, estructura u organismo. Es así en el arte, en cualquier proceso creativo o de aprendizaje, en la práctica de un instrumento, un deporte o en la adquisición de cualquier habilidad. Solo de la repetición y perfeccionamiento continuo de lo básico nace el virtuosismo y la masterización. Cualquier proyecto a largo plazo, necesita de la acción minuciosa, repetida, continuada y comprometida si quiere mantenerse en el tiempo. Esa, es la verdadera base del éxito.
La grandielocuencia hace mucho ruido y puede ser vistosa -por un tiempo- pero si no esta sostenida por detalles concretos repetidos a diario, no se sostiene. Esto es una regla universal. Observemos la naturaleza, la increíble complejidad de nuestro ecosistema terrestre es impensable sin las primeras células procariontes que fueron el origen de la vida. Sus consiguientes esfuerzos mínimos, continuados, repetitivos y progresivos que se mantuvieron durante millones de años en aras de procurar la supervivencia originaron la evolución. Si observas con cuidado cualquier sistema y/o organización funcional, lo encontrarás. La expansión jupiteriana y la totalidad neptuniana solo se conciben a través de virgo. Por eso virgo es el signo de la salud, porque la salud se construye de pequeños hábitos repetidos a diario para el correcto mantenimiento del sistema.
Igualmente esta presente en la espiritualidad, las religiones y filosofías tod@s, para alcanzar lo más alto se requieren de ritos, ciclos, rutinas etc. Porque para no perdernos o enloquecernos en la inmensidad hemos de concretarnos en la terrenalidad del detalle práctico. No obstante, también hemos de tener presente que, centrar nuestra atención únicamente en el detalle y la terrenalidad o un exceso de humildad y/o autocrítica, nos puede impedir ver la grandiosidad de nuestro potencial y de un universo lleno de posibilidades que nos apoya (balance en el eje Virgo-Piscis). La sincronicidad entre el micro y el macro solo es comprensible en el marco de un sistema donde cada cosa esta en su sitio adecuado y cumple su función. Ni más, ni menos. Así, esta luna nueva, nos plantea una oportunidad de iniciar un ciclo en el que sembrar una intención dirigida a:
Replantear, reforzar y VALORAR nuestras rutinas y hábitos, aquello que parece que “no importa” es el mayor acto de amor que tendrás para contigo mism@. Porque una pequeña acción repetida todos los días se transforma en tu realidad permanente. Dormir, alimentarte y moverte adecuadamente. Ser detallista y concreto en cumplir y poner límites en tus horas de trabajo, de ocio, de familia, de crecimiento, creatividad y desarrollo te dará serenidad, paz y una sensación de respeto personal y autocuidado. Solamente desde allí serás capaz de otorgar servicio amoroso a los demás y ser una pieza perfectamente funcional para el mantenimiento del sistema mayor.
Reflexionar sobre el modo y los motivos en que proveemos servicio, definido este servicio como el modo en el que doy o entrego algo de mi, ya sea en el trabajo, a los amigos, a la familia etc. Siento que este servicio me enriquece o me drena? Me eleva y me hace sentir plenitud porque ese servicio es consecuente con mis valores? o por el contrario siento que invierto tiempo y energía en algo que no me revierte?. Escucharnos, conocer nuestras motivaciones y necesidades, definir nuestras funciones prioritarias en cada caso, nos permite colocarnos en el rol que nos corresponde y no pecar por exceso y/o por defecto porque solo desde allí, tendremos un desempeño eficaz con resultados acordes a la energía y los recursos invertidos en cualquier ámbito o tarea.
Cual es nuestra perspectiva ante la humildad: no me permito ser reconocido para ser “humilde”, mi excesiva autocrítica me genera parálisis o limita mis potencialidades porque tengo dificultades para sentir que merezco reconocimiento? o por el contrario, mis inseguridades internas me empujan a engrandecer todos mis actos para que sean vistos y reconocidos y considero que la humildad y el servicio me hacen “menos”?. Son dos caras de la misma moneda. De nuevo, en el equilibrio esta la respuesta. Cuando estamos seguros de nuestro trabajo, nuestro aporte y nuestra función somos capaces de valorarla, disfrutar de que sea reconocida y, al tiempo, sabemos aceptar que no es necesario el refuerzo constante para considerar que esta es valiosa.Porque el valor viene de la ética y el amor puesto en cada acción y no de la evaluación externa.
Estoy segura, que hay muchos más temas relacionados con esta luna nueva, pero con o sin luna, creo que esto es un tema de interés en cualquier momento vital y es la clave para mejorar radicalmente nuestras vidas. Ir a los básicos, porque los pequeños cambios en las acciones repetidas de todos los días -y en las creencias que l@s sostienen- son, aunque al inicio no lo parezca, la puerta de entrada a un verdadero “cambio radical” que permanezca y evolucione.