Al momento de interpretar, una de las observaciones más fáciles de hacer inicialmente, es comprobar si existe predominancia de planetas en alguno de los hemisferios. Eso -tal como el elemento predominante de la carta (agua/fuego/aire/tierra)- puede proporcionarnos una información preliminar acerca del nativo sin necesidad de adentrarnos al análisis profundo y complejo de planetas, signos casas y aspectos.
El eje meridional (vertical) divide la carta en dos hemisferios oriental y occidental. El eje horizontal divide los hemisferios en superior e inferior. A su vez cada hemisferio contiene 2 cuadrantes (más adelante profundizaremos al respecto). La predominancia de alguno de los hemisferios, señala la orientación individual básica hacia la vida externa.
El hemisferio Oriental (saliente) y Occidental (poniente) está dividido por el eje meridional que marca el Medio Cielo (medio día) y el Fondo del Cielo (media noche). Este meridiano divide a los planetas en salientes y ponientes.
Los planetas salientes son aquellos que están en la mitad oriental del horóscopo y que corresponde al espacio de tiempo entre la medianoche y el mediodía. Los planetas ponientes son los que están en la mitad occidental del tema, en el tiempo que va del mediodía a la medianoche. Si hay muchos planetas salientes en el horóscopo, la persona tiene una voluntad fuerte y está a cargo de su propia vida. Si hay muchos planetas ponientes en un tema, la persona es flexible y se halla implicada en el destino de otros.
Cómo saber cual hemisferio esta enfatizado?
Determinamos la importancia de un hemisferio por el número de planetas que se encuentren en él. Para considerar que existe un hemisferio predominante debe contener 6 planetas o más. Si los planetas estuvieran distribuidos equitativamente (5 en cada uno), la predominancia la tiene aquel que contenga el Sol, La Luna y el regente del AC. Si ocurriese que dos de ellos se encuentran en un Hemisferio y el restante en otro, hemos de observar los signos y planetas presentes en cada uno para determinar la prevalencia. Si siguen las dudas, podemos comprobar cuántos planetas caen en casas angulares y cerca de los ejes de cada hemisferio (los planetas cerca de los ángulos/ejes principales tienen más fuerza).Si aún así continuamos indecisos, podemos dar preeminencia a aquel que contenga al Sol sobre la influencia de la luna y del regente del AC. En cualquier, caso más allá de estas directrices básicas, será la síntesis del interprete (en función de la totalidad del tema natal) la que determine el peso de cada hemisferio.
Hemisferio Oriental (Saliente)
Empieza en la cúspide de la casa 10 y, en sentido contrario a las agujas del reloj, termina en la cúspide de la Casa IV.
Un hemisferio oriental enfatizado nos habla de un individuo orientado a la auto-expresión y al ejercicio de la identidad personal. Cuando existe un mayor número de planetas en este hemisferio, el potencial de este individuo se manifiesta mejor al promover conscientemente sus propios asuntos o intereses. En general, aborda la vida con mucha iniciativa y espíritu proactivo. Más aun, si la mayoría de los planetas se encuentra en las 3 casas debajo del eje horizontal (Cuadrante I). Estos individuos tienden a influir en su medio ambiente, en vez de ser moldeado por él. Suele actuar de manera libre y prefiere perseguir sus metas y objetivos de manera independiente y autónoma. Estará condicionado para hacerse cargo de sus asuntos en esta vida y actuará en sus propios términos. Una vez que identifica un objetivo, si quiere obtener resultados óptimos, lo más probable es que los lleve a cabo de manera autónoma, con mucha decisión y concentración. El desarrollo de la autoconfianza es clave. En el caso de que la mayor parte de planetas de este hemisferio se sitúen sobre el horizonte (Cuadrante IV), las motivaciones del individuo serán más impersonales y universales. Centrará su atención en objetivos más relacionados con la experiencia mundana y el progreso social, sin embargo para conseguirlos empleará su propia visión.
Cuanto más planetas haya en un Hemisferio mas marcadas serán las cualidades de este en la experiencia individual. Bajo esta condición, la persona tenderá a enfatizar excesivamente su individualidad, al extremo de tener dificultades para integrarse con los demás y sentirse igual, así como para funcionar cómodamente como una entidad social. Positivamente, podemos reconocer aquí a quienes se han hecho a si mismos, individualistas que son capaces de resistir cualquier oposición con tal de dejar su propia huella en el mundo, pero cuya dificultad para cooperar y comprometerse los puede llevar fácilmente a alejar a los demás y tender a una vida solitaria.
Hemisferio Occidental
Este Hemisferio incluye la Casa 4 y se extiende hasta incluir la casa 9.
Un Hemisferio Occidental prevaleciente dota al individuo de una especial percepción de lo social y del reconocimiento de un otro.
La expresión de la propia imagen reflejada en un otro es un tema central en su experiencia. Su libertad de acción y dirección vital puede estar limitada por la influencia que ejercen otros en su vida. Pero esto, se deriva de importancia que la propia percepción del individuo otorga al vínculo. El reconocimiento y aceptación de su propia individualidad es un tema complejo para este nativo. En general, será más adaptativo al medio. Las relaciones serán imprescindibles para la manifestación de sí mismo y estará más sintonizado a compartir y actuar para ajustarse adecuadamente a las necesidades de los demás. En consecuencia, es probable que reciba atenciones de parte de los demás, quienes serán instrumento para ayudarlo a alcanzar sus objetivos. Generalmente no se opondrá ni bloqueará la ayuda y la asistencia de los otros. Así, el individuo se sentirá atraído por las experiencias de vida que le exijan relacionarse con la gente, lo que le llevará a construir alianzas positivas.
Si hubiese seis o más planetas en este Hemisferio, la persona mostrará una expresión desequilibrada al volverse demasiado dependiente de los otros a la hora de establecer su identidad social. Puede ocurrir que permita a los demás controlar y manejar sus decisiones (directa o indirectamente) más allá de lo conveniente. Esto puede provocar abusos o que se le impongan puntos de vista externos con facilidad. Sobre todo, si hay muchos planetas en las casas por encima del horizonte (casas 7, 8 y 9) que determinan contextos más sociales e interpersonales. No obstante, también puede ocurrir que el individuo tenga tendencia a servirse de los demás en su propio beneficio.
Para este nativo será difícil relacionarse consigo mismo en profundidad y tomar decisiones autónomas. Puede querer apoyarse demasiado en los demás para abordar aquello que debería resolver por sí mismo.
Los Hemisferios Oriental y Occidental son opuestos. Cuando nos localizamos en la expresión de un Hemisferio, excluyendo a su polaridad, se desarrollan perspectivas conflictivas y a veces distorsionadas. Al hacernos conscientes, podemos intentar coordinar ambos sectores de forma constructiva. Partiendo de la aceptación de nuestra tendencia principal y del aprovechamiento de sus potencialidades, también podemos reconocer el modo en que posicionarnos en cualquiera de los dos extremos puede generarnos una “comodidad muy incomoda” e intentar incluir, con paciencia y respeto a nuestros procesos, elementos complementarios para alcanzar el equilibrio deseable para nuestro desarrollo.
Texto de elaboración propia en base a los postulados de Bill Tierney (1990), Dinámica y de los Aspectos. Revista Astrológica Mercurio-3. Especial Mercurio-3 Vol.31.
Comentários